Cuando desnudamos la esencia de los instintos primarios del ser amado, sin querer, nos encontramos con nuestro propio ser y es la sencilla manera de conocer nuestros propios sentimientos, es un aprendizaje mas, que de una vez nos imprime un miedo por la existencia de un posible final, son momentos que nos puede quitar el sueño, son realidades de la coincidencia, con un amanecer prematuro que lidia con las propias sombras de nuestra propia vida.
En los silencios, evadimos nuestra atención, y nos sentimos mas firmes, sin rodeos nos vemos y muchas veces caminamos en direcciones diferentes con el fin de tener un vuelo libre.
Desenvolverse con la expresión todo lo bueno que llevamos dentro, es mostrar en un acto extraordinario, la belleza que Atesoramos para uno mismo y para con los otros, son ejemplos de excelencia, que seducen la importancia de defender nuestro talento.
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