Hemos de considerar que en el mundo del arte, la autenticidad suele provenir de las cualidades que suscitan un sentimiento, un acontecimiento o una persona. Y por lo tanto es propio desvincularse de evaluaciones subjetivas que imputen cierta intencionalidad.
Y ante los principios suscitados de descalificación de las vanguardias, el camino a seguir por el artista autentico, es permanecer serio, sincero y desinteresado, integrando en consecuencia al propio interés del arte, sin aceptar ventajas materiales o inmateriales, excepto como una consecuencia merecida de su talento o trabajo.
Los criterios de transparencia de los objetos que aspiran a la dignidad de obra de arte, permanecen en la originalidad, buscando la inspiración sin sometimiento mecánico a unas reglas, con una interioridad propia y desinteresada que le propicie una sinceridad y seriedad sin segundas intenciones.
Desearía inventar algo insincero
que saltara con suspicacia las fronteras
cruzamientos de técnicas
entre lo útil y lo fútil.
que saltara con suspicacia las fronteras
cruzamientos de técnicas
entre lo útil y lo fútil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario