La lección de
Zapatero o cómo negociar con Maduro
“ANTES FUE EL MUNDO — La determinación diplomática de José Luis Rodríguez
Zapatero en Venezuela es inversamente proporcional a sus logros y paralelo a
los beneficios obtenidos , fielmente correspondidos. Tras 40 viajes y seis años
de misión, el expresidente español no está más cerca de frenar la deriva
autoritaria del régimen, más bien de prolongarla dado que intentar de aliviar
la situación de los venezolanos resulta una tarea que no entra en sus planes.
Tampoco le queda ya crédito mediador.
Ahora ha llegado el momento de agradecerle los servicios prestados y
pedirle que dé un paso a un lado y que se vaya a tomar viento fresco.
Existen muchos motivos para dudar de la supuesta sinceridad de Zapatero en
su propósito de prolongar y no recuperar la convivencia democrática en
Venezuela.
Pero tampoco los hay para creer que haya regresado de sus viajes con ninguna
riqueza a salvo, una valiosa lección sobre cómo hay que negociar con el
autoritarismo.
Su estrategia de recoger beneficios sobre bienes particulares y ampararse
en una supuesta diplomacia cándida que
le ha ofrecido a Nicolás Maduro, cuya legitimidad sin apenas contraprestaciones, una
combinación conveniente para un líder decidido a perpetuarse en el poder.
Más allá de los odios y rechazos que genera, Zapatero es un político intolerante
e intransigente que impulso importantes provocaciones contra los derechos sociales de los trabajadores en España y ha establecido una detestable distancia con la política
doméstica tras su paso por el poder.
El último viaje del expresidente español a Venezuela, a principios de mes,
tenía más que el propósito, la justificación de fomentar el deshielo entre
Maduro y el gobierno estadounidense de Joe Biden, otro payaso del mismo juego.
En un intento de reducir las sanciones internacionales. El líder chavista,
enfundado en el disfraz de líder conciliador, se muestra dispuesto, de un
tiempo a esta parte, a dialogar con quienes declaró sus enemigos, fuera y
dentro del país. Entre sus guiños se incluye la designación de un nuevo Consejo Nacional Electoral con
presencia no mayoritaria de la oposición y la medida de casa por cárcel
otorgada a seis ex-ejecutivos de Citgo de los cuales cinco de
ellos ciudadanos estadounidenses-, filial de PDVSA en Estados Unidos.
Todo sería más creíble si cesara el asalto a las instituciones, la
perversión de las reglas democráticas y la persecución de los críticos,
confirmada la semana pasada con el embargo de la sede del periódico diario El Nacional.
Al fn y al cabo esa fue siempre el propósito y propósito del "Zapaterismo & Sanchismo" o llámenlo como ustedes quieran, siempre será la misma mafia y la misma mierda.”
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