SANTIAGO TENIA RAZON, SANCHEZ LO CONFIRMO.
Fue este
reciente 22 de Junio cuando el Presidente ahora convicto Sánchez en España se
declaraba sin darse cuenta “fuera de la ley” ya que se saltaba todos los actos
y recomendaciones de los tribunales y de las legislaciones establecidas
constitucionalmente en un país hasta la fecha democrático, con una supuesta separación
de poderes y decidía de forma unilateral tener el suficiente poder y una
imaginaria legitimidad para sacar de la cárcel a unos socios y ocultos delincuentes,
que en su momento pretendieron desintegrar la soberanía del estado Español.
Pues bien
Sánchez en ese social-comunismo, ha vuelto a querer recordarnos la
Operación Barbarroja (en alemán: Unternehmen Barbarossa), emprendida el 22
de junio de 1941, fue el nombre en clave dado por Adolf Hitler al plan de
invasión a la Unión Soviética por parte de las Fuerzas del Eje durante la
Segunda Guerra Mundial. de aquel verano maravilloso de paz y
tranquilidad, en el que se escucho la voz de Hitler cuando decidió saltar las
barreras y protagonizar el
comienzo de una cruel guerra,.
En estos
casos para las coincidencias de fechas, en el social-comunismo español hacen verdaderas
piruetas y sortilegios para coincidirlas, tal vez sea alguna reminiscencia
masónica del tipo de juego que utilizaron los expulsados y antiguos rosacruces
del panorama masónico que también sabe simular.
En
aquella misma fecha de Hitler, con gran similitud a esta, en aquel instante o
momento nadie podía creer que la guerra había comenzado, porque nada había
cambiado, el sol aún estaba caliente, el río aún brillaba. Pero las
granadas ya explotaban y la gente moría. Puede ser que existiera alguien
como algún religioso que seguía confiando en que se le respetaría y que todo
estaría bien, y no le tenía miedo a nada. Sin embargo próximamente la
reacción de los testigos presenciales como en aquel momento de la guerra será
totalmente diferente.
Hace
80 años el único miedo que existía era esa guerra que se aventuraba con gas,
ahora el amigo covid, en aquel
momento, los niños, miraban a sus madres con máscaras antigás practicando los
avatares que se avecinarían y con bolsas en las que se cosía una identificación
simbólica a modo de cruz roja, caminaban en formación y luego practicaban
vendándose unas a otras. y se arrastraban en camilla. Pero muy pronto la
guerra realmente comenzó y se convirtió en parte de esa vida.
Son solo coincidencias de sutiles entre Hitler y Sánchez , semejantes
personajes, ahora uno de ellos en camino a su próximo destino.
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