Prefiero seguir viviendo.
Aunque parezca no cierto,siempre existen ciertos detalles, ritmos y especificaciones biológicas que son de mayor preponderancia para las personas ajenas que para uno mismo.
Podíamos citar el tono o el color de los ojos, siendo este una de las circunstancias en las que de manera propia e inconsciente, personalmente menos reparamos y no obstante públicamente posee repercusión, y en consecuencia es uno de los recursos y cualidades que con mayor intensidad se utilizan para evocar el recuerdo que podamos impregnar a las personas.
Y si nos adentramos en el sistema expresivo y anímico, encontraremos las formas con que se identifica nuestra mirada, expresiones faciales o bien determinados gestos corporales que determinaran nuestra forma cordial de hacernos visibles ante la sociedad.
Todo este conjunto determinaran los estímulos nerviosos, correspondiéndose cada órgano a su función como circunstancia o motivo orgánico. Siendo en conjunto,un resultado de coincidencias de expresiones que intentan interpretarse a si mismas.
Si ustedes lo permiten, prefiero seguir viviendo.
( Francisco Urondo)
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