La falsedad Ilustrada
Todos deducimos y recordamos que ya no se conquista la nobleza por el
valor, el respeto por la virtud, ni por el talento la posición; existe otra
cualidad primerísima llamada astucia, fundadora de la política, y un elemento
ciego llamado dinero, que domina por completo la sociedad y es arbitro de todos
los poderes, de las leyes y de los hombres.
Reconocidas estas previas virtudes, los progresivos adelantos
intelectuales, se procesan y se filtran, observando que siempre se corresponden
a un movimiento por haber obrado en acciones y reacciones; Donde siempre esta
falta de exactitud en avances, se han correspondido a lo que establece la razón
de la contrariedad, y esta procure que todo paso resulte discutido en la lucha
de las ideas.
En la conciencia humana, y lo dicen sus costumbres, el que cree en la
eterna justicia, es inclinado a su virtud, y no aun solitario fanatismo. Todo
fanatismo está significado por una exaltación ideal y ciega de la cual no
participa la razón y esta forma social, es siempre transitoria, como no es apoyada
por las facultades intelectuales. El fanatismo no es perfecto a sus acciones,
carece de iniciativa y de progreso, y pudiendo ser conducido a su
contradicción, carece de inteligencia y libertad.
Todas los tipos de sociedades y sus circunstancias, existen porque
deben existir; el hecho sólo de su existencia es su razón de ser. Toda revolución,
y todo fenómeno son la consecuencia de una causa y efecto. El bien no existe en
sí, o al menos es inútil é imposible descubrir si existe o no; pero los humanos
lo crean y habiendo hecho en él la tradición un elemento histórico
considerable, resultando útil preservar el símbolo y el nombre.
Nuestra eficacia moral, es que debemos continuamente buscar y perseguir
una libertad de información, para que se establezca la autonomía de la
conciencia, y ese mismo racionalismo nos enseñará a encontrar la razón en el
certamen de las realidades, sin un envenenamiento social y tecnológico,
productos de una afirmación exagerada.
La sujeción a intereses pasajeros , resultan momentáneas pasiones
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