Amor mudable
En el risueño pronunciamiento del amor, siempre concurre lo inconsecuente
y lo variable, siendo estos algunos de los aspectos mudables, en la inapelable
ley del tiempo, que eclipsan los mil hechizos, si es el amor eterno lo que
anhelas, así que las diferentes mieles, y los distintos aromas, de fugaces encantos,
solo resultaran enamoramientos a punto de marchitarse, y será tan sólo, el
embellecimiento de tu propio espíritu, el resultado de la única causa, que podrá
cautivar la hermosura de tu alma.
También diremos, que el amor, es una primera necesidad orgánica y mental.
No es un capricho, no es un lujo, no es una cosa convencional y ficticia. Es
simplemente una necesidad puramente moral, del corazón y es tan imperiosa, que
el mayor numero de los esfuerzos de la humanidad se destina a satisfacerlo.
Pero reconocemos, que el amor varía de aspiraciones y de rumbo, aunque
no se adelante ni retroceda. No existe, ninguna norma absoluta a que ajustarse,
para que podamos saber cuando se acerca, o cuando se aparta y se aleja.
Así, sobrepasando la quimera y del hecho cierto, de que el sufrimiento del corazón, proviene de
esa ininteligible injusticia, y ese desencanto inevitable, de nuestra vida, que lo ahogamos en lagrimas, nos llevará a inquirir, y nos moverá nuevamente a indagar, un principio de armonía y
concordia, adecuado a nuestra razón.
La dimensión emocional del corazón es propiamente cognitiva.
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